Por Yeter Palmero/ Periodista de Televisión Camagüey
Todos tenemos propósitos en la vida. Con unos cumplimos
antes y otros demoran un poco. Lo cierto es que ellos nos trazan metas que van
indefectiblemente construyendo nuestro camino y personalidad.
Para cumplir un sueño llegó sin dudas el maestro Adalberto
Álvarez a la sala de Onco- Hematología del Hospital Pediátrico “Eduardo
Agramonte Piña” en Camagüey. Acompañado de funcionarios de la Dirección
Provincial de Cultura y de autoridades gubernamentales, el destacado músico
agramontino visitó a las niñas y niños
allí hospitalizados.
Una actividad cultural junto al donativo de juguetes hizo
aflorar las sonrisas de muchos. La enfermedad
fue olvidada y sólo quedaron en aquel sitio un grupo de pequeños con sus
padres sonrientes, disfrutando cada instante.
Fue un toque de esperanza la visita. Fue un regalo de apoyo
emocional a cada paciente, familiar y
personal médico que cotidianamente enfrentan las complicaciones de
padecimientos cancerígenos en estos pequeños.
A pesar de las
dificultades para obtener muchos medicamentos en el extranjero dadas las
restricciones del Bloqueo impuesto a la isla;
estos niños reciben un atención profesional de alto rigor totalmente
gratis acompañada de los más recientes avances científicos en torno a estas
enfermedades. El humanismo del Sistema de Salud Cubano es una realidad palpable
e indiscutible.
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